sábado, 15 de diciembre de 2012

Los presupuestos de Rajoy, cada vez más intervenidos por la UE


Al borde de terminar este ejercicio 2012, el Gobierno se ha estado dirimiendo permanentemente entre la opción de pedir o no el rescate total de la economía española a la Unión Europea. Muchas voces apuntan a que dar este paso sería liquidar de un plumazo la legislatura, que de por sí cuenta ya con muchos palos en las ruedas del Partido Popular.
 Con el rescate financiero ya en marcha, y mientras Rajoy se decide a solicitar dicha intervención, las desavenencias entre los 27 países miembros no cesan. En los círculos políticos españoles en Bruselas hay una gran satisfacción por acercarse las posturas entre Madrid, Roma y París, pues según afirmó Luís de Guindos, titular de Economía y Competitividad, “la unión hace la fuerza”.
 La fórmula para dar el salto hacia la Europa de cuentas claras y políticas económicas coordinadas desde Bruselas, por la que los líderes brindaron en el Consejo, es en realidad un complejo plan que en los próximos meses seguirá cobrando forma. "No hay una bala mágica" para salir de la crisis, repite  el comisario OlliRehn, así como la canciller alemana, ambos defensores de que el plan llevará su tiempo y su sacrificio, pero que merecerá finalmente la pena. De momento, prevé dotar a la Comisión Europea del poder para meter la tijera en los presupuestos nacionales y obligar a las capitales a mantener comunicación constante con las instituciones comunitarias para tomar cualquier decisión económica que no se hubiera discutido previamente en el contrato económico que los países deberán firmar, tal y como recoge Pablo Montesinos en Libertad Digital.

 ¿Cómo afectará este nuevo contrato en la práctica?

 Las tan traídas y llevadas recomendaciones de Bruselas dejarán de ser lo que pretendían parecer, para constituirse en lo que en la práctica ya eran: unas obligaciones de facto que desde 2013 serán obligaciones legales que habrá que cumplir inexorablemente por parte de todos los gobiernos de los países miembros.
 Este contrato, está capitaneado por Merkel, que tiene elecciones el próximo otoño y está velando por sus expectativas electorales. Mientras su capacidad de controlar los presupuestos de los miembros de la UE en dificultades aumenta, nada hay de la creación de un presupuesto comunitario destinado a paliar los efectos de la crisis en los países que sufren graves problemas.  A pesar de que cada vez hay más voces en Bruselas que abogan por apostar por el crecimiento aunque a corto plazo suponga más déficit, la letra de la canción sigue componiéndola Alemania, y por ende, la austeridad es la máxima en las decisiones de la Unión Europea.

 Fuentes:
-          www.Libertaddigital.com
-           Agencia EFE.

No hay comentarios:

Publicar un comentario